
El juicio en Estados Unidos entre la FTC y Microsoft por la compra de Activision por una cantidad desorbitada de plata ha traído como información colateral algunos datos importantes que nada tienen que ver con la adquisición, pero sí con futuros eventos que las empresas desean mantener en absoluto secreto hasta el momento indicado.
Sin más preámbulo, aquí esos datos:
- El próximo Elder Scrolls saldrá en 2026. Una de las abogadas de Microsoft reveló que el siguiente gran juego de Bethesda se está desarrollando hace un tiempo y tiene fecha de lanzamiento proyectada para 2026. Este será el verdadero sucesor de Skyrim y lo único más o menos seguro en estos momentos es que se llamará The Elder Scrolls VI; el subtítulo, nadie sabe.
- La potencia de la siguiente consola de Nintendo. Bobby Kotick, CEO de Activision, reveló -con o sin querer- que la sucesora de la Switch “tiene la potencia de una consola de octava generación”. En la práctica, esto significa que debería ser una especie de Xbox One o PlayStation 4, tal vez en versión portátil para seguir con la linea de la Switch.
- PlayStation 5 líder absoluto de mercado. La diferencia entre la cantidad de consolas vendidas en esta generación parece ser mayor a la que había entre Xbox One y PlayStation 4. Un ejemplo de esto es que durante el último trimestre del año se vendieron solo 3 millones de Xbox (Series X y S), frente a los más de 7 millones de PlayStation 5. Si esto ocurrió en la época navideña -la mejor del año para la venta de hardware-, ni imaginar como fue el resto de 2022 para Xbox.
- Lo que cuesta desarrollar un videojuego triple A. Un documento mal editado reveló el presupuesto de Horizon Forbidden West y The Last of Us: el primero 212 millones de dólares a lo largo de cinco años, mientras que el segundo 220 millones de dólares. Ahora se entiende por qué a Sony no le gusta la idea de lanzar sus juegos en PlayStation Plus desde el primer día.
- Microsoft quiso comprar a Sega. En 2020, Microsoft identificó a Sega como una de las compañías que podría comprar. Según Phil Spencer, el catálogo de Sega en plataformas de escritorio y móviles cabe perfecto dentro de sus planes e incluso estimaron un precio de 2 mil millones de dólares. Luego de hecho público este dato, desde Sega agradecieron los piropos pero aseguraron que no están a la venta por ahora.
- Otras compañías en la lista de compras. Además de Sega, la lista de Microsoft incluyó a Square Enix, Thunderful, Supergiant Games, Niantic, Playrix, Zynga, IO Interactive, Scopely y Bungie. Lo curioso de esta última es que hasta hace poco más de una década pertenecía a Microsoft y luego se hicieron independientes, solo para volver a ser adquiridos recientemente por Sony luego de que sus antiguos dueños estimaran que el precio era muy alto a cambio de solamente recibir Destiny.
- Starfield exclusivo de PlayStation. El testimonio de Phil Spencer y compañía reveló que Microsoft consideró comprar a Zenimax luego de que Sony pagara por la exclusividad temporal de Deathloop y Ghostwire Tokyo para PlayStation. Ante la posibilidad de que Starfield siguiera el mismo rumbo, en Xbox agarraron el toro por las astas y se quedaron con la compañía completa.
Si se quedó algo afuera, avisen en los comentarios. Soy solo un becario. Y la fuente de toda esta información es la audiencia pública del caso, que se transmitió vía Zoom durante toda la semana.